En Brasil, la presidencia de Luiz Inácio Lula da Silva comenzó con la intención de un golpe de estado. Algunos de los desafíos endémicos de Brasil también continuaron sin cesar, como las dificultades económicas y la deforestación. Paulo Sotero, exdirector del Instituto Brasil del Woodrow Wilson Center y exjefe rotativo del Estado de São Paulo en Washington, analiza los primeros 100 días del presidente brasileño.