Lun. Abr 22nd, 2024

    (CNN Español) — Entre el 1 y 2 de noviembre, los mexicanos realizan una serie de rituales que tienen su máxima representación en la ofensa del Día de Muertos: altares llenos de colores, sabores y olores que se colocan cada año en el suelo en la intimidad de los hogares así como en los talleres, en los hospitales y en las plazas públicas de todo el país para honrar la memoria de los que no están y recibir sus almas, aunque estés solo por una noche, en el mundo de los vivos.

    Así que ponle un regalo de Día de Muertos a tus mascotas 2:07

    Es una fiesta, una celebración de la muerte que toma como punto de partida las raíces indígenas de las culturas indígenas de Mesoamérica, según los historiadorespara fusionarse con las creencias católicas y dar lugar a una fiesta que sigue evolucionando con el paso del tiempo.

    ¿Sabes cómo son las ofrendas y qué elementos se integran?

    La ofensa del Día de Muertos, según el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (Inpi) de México, forma parte de un ritual con la intención de “rodearse de nuestros muertos para dialogar con su rescate, con su vida”.

    Y para recordarlos y recibirlos en su camino de regreso al mundo terrenal para compartir con los vivos, de acuerdo a las costumbres de la población mexicana, se instalan altares llenos de colores, sabores y flores: flores de cempasúchil, calaveritas de azúcar y chocolate, pan de muerte, agua, velas, frutas, vino, refrescos y toda la comida y bebida favorita de nuestros antepasados.

    No es más que un reflejo del sincretismo entre culturas: la cosmovisión de los pueblos indígenas y las creencias religiosas del catolicismo.

    “Los europeos ponían algunas flores, ceras, velas y velos; los indígenas añadían el sahumerio con su copal y la comida y la flor de cempasúchil (Zempoalxóchitl)”, dice el Inpi.

    Asi vi la barbie dia de muertos que vi una mexicana 0:41

    El historiador Héctor Zarauz, autor del libro “La fiesta de la Muerte”, Destacar otros elementos que se agregaron durante la conquista.

    “Las cruces, que son representaciones del catolicismo, o algunas bebidas que se agregan a la ofrenda para los muertos, bebidas destiladas que antes no existían. Harina”, dijo Zarauz a CNN.

    Entre cempasúchil, calaveritas de azúcar y papel picado: los elementos que componen la ofrenda del Día de Muertos

    (Crédito: PEDRO PARDO/AFP vía Getty Images)

    La ofensa del Día de Muertos puede depender de la región del país en la que nos encontremos, pero existen una serie de variaciones que son elementos esenciales y que aparecen en la mayoría de los altares, los cuales suelen estar organizados por múltiples niveles que simbolizan el camino que recurre el muerto. .

    Hay dos niveles que representan el cielo y la tierra. Luego está en los de tres que representan el cielo, la tierra y el inframundo. Finalmente, el nivel siete simboliza los pasos que dan quienes tienen que pasar el alma para entrar a otra vida, según las creencias mexicanas.

    Los altares u ofensas se colocan, siguiendo la tradición, desde el 31 de octubre y esta lista para recibir a los seres queridos en la madrugada del 1 y 2 de noviembre, días centrales de esta celebración. El primero recupera a los niños muertos y el segundo a los adultos.

    estos hijo elementos esenciales de una ofrenda al altar de la muerte:

    Agua: las ofrendas suelen tener una guía de los cuatro elementos de la naturaleza, entre ellos el agua que simboliza la pureza y los espíritus que se reciben para saciar la sed después del largo viaje.

    Sal: Es el elemento de la purificación, sirve para que el cuerpo no se corrompa, en tu viaje de ida y en tu camino de regreso el próximo año.

    Velas y cirios: En el México prehispánico se usaban las rajas de ocote. Actualmente, el cirio se utiliza de diferentes formas: velas, velas o ceras. La llama que produjo significa «la luz», la fe, la esperanza y sirve de guía para que los animales puedan llegar a sus antiguos lugares y aligerar el regreso a su hogar.

    Cruz de copal, incienso y ceniza: para los indígenas, el copal era un elemento de oración y alabanza a los dioses mientras que el incienso se incorporaba con la llegada de los españoles. Si lo usas para limpiar el lugar, tienes Rondan los malos espíritus. La cruz de ceniza sirve para que el alma llegue al altar y pueda expiar sus faltas pendientes.

    Flores de cempasúchil: Dice la tradición que es a través del color naranja de esta flor que las almas de los que han partido encuentran su camino de regreso al mundo de los vivos.

    Comida, bebida y pan de muerto: la comida está destinada a eliminar a los muertos que visitan la ofrenda por el que quieren poner en sus favoritos favoritos. Para los adultos, puedes tomar bebidas alcohólicas —el ron o el tequila son comunes— que les harán recordar sus momentos felices. Mientras que a los niños si ofrecen dulces típicos.

    Si se incluye el pan de muerto como el «cuerpo de Cristo», según las creencias católicas, y el chocolate que en la tradición prehispánica se preparaba con el agua que se usaba con el aguardiente para lavar, entonces se impregnaban con el esencia del difunto.

    Calaveras de azúcar: las medianas recuerdan que la muerte siempre está presente; Los pequeños están dedicados a la Santísima Trinidad y los grandes al “Padre Eterno”. Las culturas mesoamericanas tomaban los cráneos de los prisioneros sacrificados y los jerarquizaban para honrar a los dioses, el altar se llamaba tzompantli. Las calaveras aluden a esta tradición prehispánica.

    Papel triturado y petate: El papel triturado se usa comúnmente para representar el aire, además de darle un toque festivo. El petate se utiliza para que los muertos descansen y puedan funcionar como manta para colocar los elementos.

    Las fotos: las fotos de los seres queridos que ya fallecieron son uno de los elementos centrales del altar de muertos pues dejan ver a quién está dedicado a la ofrenda.

    El izcuintle: el izcuintle es un perro prehispánico cuya figura se ofrece en los altares dedicados a los niños como un juego para que las almas de los pequeños se alegren al llegar al banquete. El perro izcuintle es el que ayuda a las almas a cruzar el caudaloso río Chiconauhuapan, que es el último paso para llegar al Mictlán, el inframundo para los mexicanos.

    Con información de Krupskaia Alis

    Por admin

    Deja una respuesta

    Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *